viernes, 18 de mayo de 2012

Hablemos con propiedad de tipos de muebles y estilos

           En mi extensa experiencia como responsable de tienda en la firma MIMO Mobiliario y Decoración estoy acostumbrado a lidiar con muchos tipos de clientes, pero lo que es cierto, es que con el tiempo y el acceso a la información masiva, sin contar el daño que está haciendo IKEA a nuestra profesión, ahora todo el mundo entiende de diseño y decoración. 
No, no es que esté en contra de la democratización del diseño y que piense que crear un entorno habitable, agradable y actual debería estar sólo al alcance de unos pocos, pero de esto a que usemos a la limón todo tipo de terminología estilística con respecto al mueble, acabados e interiorismo, dista mucho.

Terminos como "barroco", "Luis XV", "rococó", "neoclásico" o "art-decó"... brotan de nuestra boca sin conocer muy bien a qué hacen referencia exactamente. Más delito tiene no distinguir entre silla o sillón, por ejemplo, y son términos que se siguen confundiendo. 
Puede que la culpa radique en que no existe como tal un manual de terminología o diccionario que englobe toda la nomenclatura de tipología de muebles y estilos de interiorismo desde que el mundo es mundo, sencillamente porque nadie lo ha hecho, pero os recomiendo un blog que sigo con fervor para que aprendáis todo lo que seais capaces al respecto de esta cuestión:

 
Está escrito por Pablo Pena González que es profesor de Historia del Arte de la Escuela de Diseño de Interiores Arte 4 de Madrid y asesor del Museo del Traje de Madrid, y no tiene desperdicio.

Ni qué decir tiene que si además nos encontramos actualizaciones de diseños clásicos fabricados en otros materiales, la desorientación ya es absoluta.  Por ejemplo, ¿cómo definiría esta pieza rediseñada por Pedrali a partir de un diseño clásico? Seguramente, muchos de mis clientes lo definirían como un sillón Luis XV o barroco, e incluso serían capaces de discutirlo fervientemente.

Yo les invito a echar un vistazo al Blog para que lo descubran por ustedes mismos.




jueves, 17 de mayo de 2012

Obsolescencia programada, "Compra, tira, compra"


Desde que vi el documental denominado "Compra, tira, compra", sobre obsolescencia programada que os adjunto en este post, es inevitable que piense cada día en la espiral de consumo en la que nos vemos inmersos la sociedad actual. 


Hacía mucho tiempo que esa reflexión me invadía inconscientemente hasta el punto de indultar cualquier objeto de decoración, mobiliario, componente, herraje, etc. cuyo fin último era la basura, generando con ellos nuevos objetos con un valor añadido, el de la patina del tiempo que mediante mis transformaciones para cambiar su uso o simplemente para restaurarlos, habían hecho de esos espectros desalmados, objetos interesantes y me atrevo a decir que en muchos casos bellos, o al menos ésa fue siempre mi intención.


Ahora, que a todo se le pone nombre, a esta sensibilización por devolver la función a objetos de deshecho se le llama ecodiseño, tendencia al alza que en estos tiempos de austeridad ya es una moda.


El caso es que existe una industria que produce artículos con cada vez menor durabilidad en el tiempo para optimizar los beneficios a través de compras repetitivas que generan un volumen de negocio muy fuerte en todo el mundo, a diferencia del tipo de artículos que se producian antes de la Gran Depresión Norteamericana (véase la bombilla o las medias referidas en el documental). 


Pues yo me revelo ante esto recuperando todos esos objetos que saldrían de la circulación consumista, generando nuevas cosas personalizadas que nadie podría producir en serie porque contienen un aditivo en peligro de extinción: el desinterés por su consumo, casi tachado de exclusividad.


Iré cargando material fotográfico de todas esos tesoros recuperados en breve, y así comprenderéis cuánto romanticismo le pongo a la lija y la pintura, entre otros.